La agricultura moderna intensiva basada en el uso de paquetes de agroquímicos y tecnologías foráneas que alteran los procesos naturales, han generado una crisis en el ambiente y en el mundo rural. Lejos de alcanzar el tan anhelado “desarrollo” y superar la crisis alimentaria, la agricultura química ha ahondado la pobreza rural y la degradación ambiental.



Por ello Rikcharina apuesta por la Agroecología como el arte y la ciencia que promueve una producción sostenible y en equilibrio con la naturaleza, que se nutre de los saberes de las comunidades indígenas y campesinas para obtener productos agrícolas sanos, que aporta al mejoramiento de la calidad de vida de las familias, que contribuye con la seguridad alimentaria, protege el ambiente y la agrobiodiversidad, pero al mismo tiempo promueve cambios estructurales que provocan el acceso de la población rural al agua y a la tierra, avanzando hacia la definición de políticas públicas incluyentes y la generación de oportunidades.
Por ello Rikcharina apuesta por la Agroecología como el arte y la ciencia que promueve una producción sostenible y en equilibrio con la naturaleza, que se nutre de los saberes de las comunidades indígenas y campesinas para obtener productos agrícolas sanos, que aporta al mejoramiento de la calidad de vida de las familias, que contribuye con la seguridad alimentaria, protege el ambiente y la agrobiodiversidad, pero al mismo tiempo promueve cambios estructurales que provocan el acceso de la población rural al agua y a la tierra, avanzando hacia la definición de políticas públicas incluyentes y la generación de oportunidades.